Por: Miguel Angelino (Thoriz)
El terror espacial regresa con una de las criaturas más espeluznantes, misteriosas y despiadadas del cine, de la mano de Fede Álvarez, el director uruguayo conocido por darle nueva vida a franquicias de terror como Evil Dead (2013) y No Respires (2016), y ahora toma las riendas de Alien: Romulus.
El Xenomorfo es una de las criaturas extraterrestres más icónicas en la historia del cine, introducida en Alien: El octavo pasajero (1979), dirigida por Ridley Scott y diseñada por el artista H.R. Giger. Si quieres conocer más sobre la simbología e historia detrás de su diseño, puedes leer nuestra nota. Como mencionó Fede Álvarez durante su visita a México, a diferencia de otras sagas populares de ciencia ficción, Alien es una saga de directores, cada uno aportando su visión y creatividad en sus cintas.
Sin embargo, hay que reconocer que el que ha establecido y ha tenido más peso en su lore es Riddley Scott, quién dirigió las dos entregas anteriores, que fueron las precuelas Prometeo (2012) y Alien Covenant (2017).
Estas películas abordaron el origen del Xenomorfo y exploraron temas como el creacionismo y el origen de la humanidad a través de la historia de una raza alienígena conocida como los Ingenieros. Sin embargo, esta visión no conectó con toda la audiencia y no tuvo el éxito esperado en taquilla, dejando la historia inconclusa.
7 años después llega Fede Álvarez con una nueva propuesta que pretende regresar a Alien al terror espacial de sus inicios, con una una historia que transcurre entre Alien: El octavo pasajero (1979), y la secuela Aliens: El regreso (1986), específicamente 20 años después de la primera. En esta película tenemos un reparto más joven que en cintas anteriores, siendo protagonizada por un grupo de amigos que quieren escapar de su planeta de origen en busca de un futuro mejor, lejos de la corporación Weyland Yutani que maneja todos los recursos, pero en ese camino se encuentran con una estación abandonada que ha recogido importante y peligroso material que hemos conocido en las cintas anteriores.
La cinta se siente como un homenaje a la saga Alien, con una tripulación enfrentando situaciones peligrosas y terroríficas en medio del devastador silencio y la oscuridad del espacio. La premisa es sencilla, y es fácil empatizar con los personajes, aunque en este tipo de películas los protagonistas suelen tomar decisiones cuestionables, y en este caso, se abusa un poco de ello.
No obstante, hay que recordar que son jóvenes con poco o ningún conocimiento de a qué se enfrentan. Un aspecto interesante de la trama es que el androide, o "sintético", que acompaña a la tripulación, en este caso tiene una conexión personal con la protagonista, siendo prácticamente su hermano. Sin embargo, como toda máquina esta sirve a un propósito, y este va cambiando a lo largo de la película, haciendo las cosas más complicadas para los protagonistas y más interesantes para el espectador.
El elenco de esta cinta esta conformado por Cailee Spaeny como la protagonista Rain Carradine, Isabela Merced como Kay, David Jonsson como el androide Andy, y Archie Renaux como Tyler. Todos desempeñan bien sus papeles, destacando especialmente Cailee, quien rescata el espíritu de protagonistas anteriores de la saga, convirtiéndose en una guerrera al estilo de la icónica Ripley. Además la actuación de David Johnson como el carismático androide también es bastante admirable.
En cuanto a la dirección, Fede Álvarez entiende perfectamente la esencia de la saga y cumple su promesa de "no cagarla" a Ridley Scott. Aunque la película podría haberse quedado en una simple anécdota con el Xenomorfo, Álvarez va más allá, respetando y enriqueciendo el lore que Ridley ha construido desde Prometeo, con referencias que los fanáticos reconocerán claramente. Además, aporta su propio toque, especialmente en la última media hora de la película, creando una de las situaciones más aterradoras y memorables de la saga.
La historia tiene una conclusión digna y cerrada, sin dejar muchos cabos sueltos para una secuela, especialmente porque en la cronología de la saga sigue Aliens (1986). Sin embargo, esto no descarta la posibilidad de que veamos a Álvarez de nuevo en la franquicia, especialmente con la positiva recepción del público, que la ha catalogado como una de las mejores películas del verano. Sin duda, es una excelente opción en cartelera que no te puedes perder en cines, y aunque se puede disfrutar sin haber visto las anteriores entregas, es recomendable ver Alien (1979), Prometeo y Alien: Covenant para entender mejor la historia y las referencias.
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